Uno de los pasos esenciales para obtener tu licencia es realizar un examen médico para brevete que certifica tus aptitudes físicas y psicológicas. Esta evaluación incluye chequeo de vista, oído, reflejos y coordinación, además de una prueba psicológica que valida tu capacidad para conducir. Los resultados son emitidos oficialmente y registrados para que continúes con el trámite. Es un requisito obligatorio que garantiza seguridad y confianza en la conducción, promoviendo carreteras más responsables para todos.